domingo, 1 de septiembre de 2013

El silencio del momento.

Cuando conocemos a alguien no sabemos si será para siempre o por un espacio corto de nuestra vida, cumplirá con la "misión" y desaparecerá, pues yo esto último no lo aceptaba, pensaba que cuando aprecias a alguien, y es de verdad, esa persona permanecerá contigo por un espacio largo de tiempo, al menos, nunca pensé que cuando alguien te impacta los segundos pueden estar contados, y en un sólo parpadeo esa persona toma su rumbo, lejos muy lejos de ti. No significa que se vaya lejos, puede ser......, o muera.....puede ser..... puede incluso que sigáis compartiendo ciudad, tiempo, calles, aire, nubes, sol, cielo, tierra pero esté a universos lejos de ti.
Eso me ha pasado, dicen que más vale tarde que nunca, pues yo me lo aplico, tarde he aprendido que vivir como el último día no es una frase hecha, que de verdad sería interesante aplicarla, y no dejar cosas por decir, cosas que se quedan atrapadas en el corazón, en el alma, en el cuerpo, y ya no saldrán jamás. 
Que esa persona que apreciabas ya no está, aunque su cuerpo siga andando por tus calles, por tus aceras, respire tu aire, y el sol lo bañe como a ti, esa persona nunca estuvo, y si estuvo desapareció un día, y se fue al mundo desconocido, y ya no sabes quien es ese  cuerpo y el nombre que tu nombrabas ya no sabes quien es, y se forma un silencio, un silencio embarazoso en un momento por que es una persona desconocida para ti. Cuantas personas podemos tener dentro esperando salir?

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